"El pensamiento lateral" Edward de Bono (22/52 2025)
Albert
Einstein, entrevista en “The Saturday Evening Post” 26/oct/1929.
Todo gran avance humano comienza con una mirada distinta. Las ideas que transforman el mundo no nacen de repetir lo que ya sabemos, sino de atreverse a pensar lo que aún nadie ha visto. La historia de la creatividad es la historia de aquellos que se atrevieron a imaginar otras realidades, a cuestionar lo obvio y a conectar lo aparentemente inconexo. En un tiempo donde la información abunda pero la sabiduría escasea, cultivar el pensamiento lateral se convierte en una necesidad urgente. Esta forma de pensar no busca respuestas automáticas, sino ángulos inesperados; no sigue caminos rectos, sino que traza nuevas rutas. El libro “el pensamiento lateral” de Edward de Bono ha significado un hito porque ha introducido un método estructurado para romper con patrones mentales/lógicos habituales con el fin de encontrar soluciones creativas para las organizaciones, la educación, la resolución de conflictos, el diseño de productos y la mejora personal. Los siguientes conceptos que describe el libro son aplicables a todas las edades:
- Pensar diferente es un arte, pero también una técnica que se puede aprender y desarrollar
- El pensamiento lógico y lineal no basta para resolver problemas nuevos
- El humor, el absurdo y el azar pueden ser aliados creativos.
Millones de personas utilizan de forma innata el pensamiento no lineal para resolver retos cotidianos. En el ámbito organizacional el método de pensamiento lateral de Edward de Bono ha sido utilizado formal y exitosamente en grandes corporaciones como Nestlé, Shell, Ericsson, Siemens e instituciones educativas en Irlanda, Nueva Zelanda y Singapur solo por nombrar algunos casos. El pensamiento lateral nos enseña que la creatividad se puede estructurar, enseñar y practicar. No es magia, es método. Y su mayor virtud es liberar el talento atrapado por la lógica rutinaria. En palabras de De Bono, la creatividad no consiste en una nueva manera, sino en una nueva visión.
A continuación las veinte enseñanzas clave de "El
pensamiento lateral" de Edward de Bono (22/52 2025)
1. Pensar diferente no es un error, es una evolución
El
pensamiento lateral nos recuerda que las grandes ideas muchas veces nacen fuera
del camino tradicional. En lugar de seguir los moldes establecidos, invita a
imaginar soluciones que aún no existen. Esta actitud no solo fomenta la
innovación, sino que permite la evolución mental y cultural. Como explica Adam
Grant en el libro “Originals” quienes se atreven a desafiar lo establecido son
quienes abren nuevos caminos para todos. Pensar diferente es una forma de
valentía y una señal de progreso. El pensamiento lateral propone saltos, reencuadres
y provocaciones que nos sacan de caminos trillados. Según se menciona en el
libro “How Non-Conformists Move the World” de Adam Grant, No se trata de
encontrar la respuesta correcta, sino de encontrar una nueva pregunta.
2.
La lógica no siempre es la mejor herramienta
La
lógica secuencial, aunque poderosa, puede convertirse en una jaula. Muchas
veces los problemas complejos no se resuelven con análisis lineal, sino con
intuición y saltos mentales. Malcolm Gladwell, en su libro “Blink”, muestra
cómo las decisiones basadas en intuiciones bien entrenadas pueden superar los
razonamientos analíticos. Pensar lateralmente es confiar en la agudeza interior
para iluminar caminos más allá de lo evidente.
3.
El pensamiento creativo puede aprenderse
La
creatividad no es privilegio de unos pocos, sino una capacidad universal que
puede desarrollarse. Pensar lateralmente es ejercitar la mente en nuevas
direcciones, retando lo convencional. En “The Creative Habit”, Twyla Tharp
demuestra que el talento creativo florece con entrenamiento, método y
disciplina. Si queremos innovar, debemos entrenar nuestra imaginación como
entrenamos nuestros músculos.
4.
Los patrones mentales nos limitan
El
cerebro humano tiende a automatizar respuestas para ganar eficiencia, pero esto
también limita nuestra capacidad de ver lo nuevo. El pensamiento lateral rompe
con esos automatismos, invitándonos a descubrir alternativas ocultas. En “Mindset”
(09/52 2025), Carol Dweck expone cómo una mentalidad de crecimiento desafía los
límites autoimpuestos y permite una expansión constante del potencial humano.
5. Los errores pueden ser puertas a la innovación
Donde
muchos ven un error, el pensamiento lateral ve una semilla de posibilidad. El
fracaso puede ser el terreno fértil de donde brota una gran idea si se aborda
con mente abierta. En “The Innovator’s DNA” (Harvard Business Review Press,
2011), se explica cómo las organizaciones líderes convierten errores en
aprendizajes valiosos. El error deja de ser una amenaza y se transforma en una
invitación a reinventarse.
6.
Una pregunta diferente puede cambiar todo
A
veces no es el problema el que está mal enfocado, sino la pregunta que le da
origen. El pensamiento lateral nos enseña a formular interrogantes desde otros
ángulos. Warren Berger en el libo “A More Beautiful Question” demuestra cómo
las preguntas profundas, provocadoras y creativas pueden abrir puertas que
antes ni siquiera sabíamos que existían. Cambiar la pregunta puede ser más
poderoso que encontrar la respuesta correcta.
7.
Las ideas absurdas no siempre lo son
Muchos
descubrimientos comenzaron siendo ridiculizados por no ajustarse a la lógica
del momento. El pensamiento lateral da la bienvenida a esas ideas aparentemente
absurdas, porque entiende que lo que hoy parece inverosímil mañana puede
cambiar el mundo. Frans Johansson en el libro “The Medici Effect” muestra cómo
las combinaciones inusuales de disciplinas y culturas generan innovación
disruptiva. A veces, lo ilógico es solo lo adelantado.
8.
La creatividad se entrena con provocación
El
pensamiento lateral propone técnicas como el uso deliberado de provocaciones
para sacudir la mente. Estas situaciones no buscan soluciones inmediatas, sino
romper la rigidez del pensamiento. Austin Kleon en el libro “Steal Like an
Artist” sugiere que la creatividad surge al mezclar, reinterpretar y provocar
conexiones nuevas. Provocar el pensamiento es encender un fuego.
9.
No todos los caminos llevan a Roma, pero algunos llevan más lejos
El
pensamiento lateral nos enseña que hay muchas formas de llegar a un destino, y
algunas son inesperadamente más ricas. David Epstein en el libro “Range”
defiende el valor de explorar caminos diversos, de combinar experiencias y
conocimientos que en apariencia no están conectados. La creatividad muchas
veces se alimenta de esa riqueza variada.
10. El pensamiento lateral desbloquea el potencial colectivo
Cuando
un equipo aprende a pensar lateralmente, se desbloquea la inteligencia
colectiva. La diversidad de perspectivas se convierte en una ventaja creativa. Ed
Catmull en el libro “Creativity, Inc.” explica cómo Pixar construyó una cultura
que valora lo inesperado y permite a todos aportar sin miedo. La colaboración
florece donde hay libertad mental.
11.
La imaginación no es opuesta a la razón, la complementa
El
pensamiento lateral no se opone a la lógica, la complementa con intuición,
metáfora y exploración. Iain McGilchrist en el libro “The Master and His
Emissary”, describe cómo el hemisferio derecho del cerebro, asociado a la
creatividad, ofrece una visión más integrada de la realidad, mientras que el
izquierdo se especializa en la fragmentación y análisis. El equilibrio entre
ambos genera profundidad y sabiduría.
12.
La creatividad requiere seguridad psicológica
No
se puede pensar libremente en un entorno que castiga el error o la diferencia.
El pensamiento lateral necesita espacios donde sea seguro explorar lo inusual. Amy
Edmondson en el libro “The Fearless Organization” muestra cómo los equipos con
mayor innovación son aquellos donde las personas se sienten libres de hablar
sin temor al juicio o al castigo.
13.
La rigidez mental es enemiga del progreso
La
incapacidad de cuestionar nuestras ideas es una forma de estancamiento. El
pensamiento lateral nos anima a revisar, dudar, replantear. En Adam Grant en el
libro “Think Again” sostiene que el progreso depende de nuestra disposición a
desaprender y pensar de nuevo. La flexibilidad mental no es debilidad sino es
inteligencia en acción.
14.
Pensar lateralmente es una forma de coraje
Atreverse
a pensar diferente implica riesgo, a veces al ridículo, otras veces al error o bien
al rechazo. Pero sin ese coraje, no hay avance real. Brené Brown en el libro “Dare
to Lead” presenta a la vulnerabilidad como una fuente de poder creativo y
también sostiene que la valentía intelectual es indispensable para el liderazgo
transformador.
15. Una mente abierta encuentra caminos donde otros ven muros
Donde
muchos ven obstáculos, una mente lateral ve posibilidades. La apertura al
pensamiento divergente nos permite conectar lo desconectado y descubrir nuevas
rutas. Elizabeth Gilbert en su libro “Big Magic” celebra la curiosidad como la
mejor aliada del pensamiento creativo. Quien pregunta, juega y se asombra,
siempre encontrará caminos.
16.
El pensamiento lateral mejora la toma de decisiones complejas
Cuando
la información es incompleta o contradictoria, lo lineal se vuelve
insuficiente. El pensamiento lateral permite integrar intuición, imaginación y
experiencia para decidir mejor. Philip E. Tetlock y Dan Gardner en el
libro “Superforecasting: The Art and Science of Prediction” revelan cómo los
mejores pronosticadores del mundo piensan lateralmente para imaginar escenarios
alternativos y anticipar con mayor precisión.
17.
La creatividad transforma la comunicación
Pensar
lateralmente también transforma la forma en que transmitimos ideas. Chip y Dan
Heath en el libro “Made to Stick” muestran que las ideas que sobreviven
son simples, concretas, emocionales y sorprendentes, justo como las que nacen
del pensamiento lateral. Una comunicación creativa no solo informa sino que
también inspira.
18.
Lo imposible a veces es solo lo no intentado
El
pensamiento lateral se atreve a pensar lo impensado. Imagina soluciones donde
otros ven límites. B.y R. Zander en el libro “The Art of Possibility” demuestran
que la realidad puede ampliarse enormemente si cambiamos la perspectiva. Lo que
parecía imposible puede convertirse en realidad si se mira desde otro ángulo.
19.
Pensar diferente es también una responsabilidad para uno mismo
La
creatividad no es solo para innovar productos o resolver problemas técnicos
sino también es para transformar vidas. Bill Burnett y Dave Evans en el libro “Designing
Your Life” enseñan cómo usar el pensamiento creativo para rediseñar la propia
vida con sentido, alegría y propósito. Pensar lateralmente es un acto de diseño
vital.
20. El pensamiento lateral es una herramienta para liberar el talento
El
verdadero talento florece cuando se libera de la rigidez, del miedo al error,
de la obediencia ciega. La creatividad no es un don innato. El pensamiento
lateral empodera a las personas, mediante un método, para pensar con
autenticidad, explorar con libertad y crear con sentido. Daniel Pink en el
libro “Drive” explica cómo la autonomía, el propósito y la maestría son claves
para la motivación humana. El pensamiento lateral estimula las tres.
Plutarco en "De la educación de los niños" (Περὶ παίδων ἀγωγῆς / De liberis educandis) dentro de su colección Moralia defendía una visión activa y formativa de la educación. Educar no era adoctrinar, sino despertar.
“El
cerebro no es un vaso por llenar, sino una lámpara por encender.”
Suerte. Buen viaje.
mario kogan
24/may/25
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